EL MUNDO DE QUINO.
No hay que dejarse engañar por el trazo simple, redondo y delicado que utiliza Quino para fijar sus imágenes sobre el papel. Han definido su humor como "ingenuo y atroz", y con mucha razón.
Lo suyo no son chistes, ni fábulas ni caricaturas.
Y si algo nos hace reír, no sondesde luego ciertos horrores del mundo, sino más bien la mirada severa y al mismo tiempo socarrona que Quino nos presta para que nos enfrentemos a nuestro modo de vivir y a sus consecuencias.
Quino lo sabe y lo dice: "Mi relación con el mundo es de sufrimiento, porque todo lo que ocurre en él es horrible"
Y sus dibujos expresan esta relación: el disgusto que le provoca la hipocresía, la banalidad en las relaciones, la "adultez" cuando es sinónimo de tontería y falta de sentido común, los amos de la tierra que pisotean los derechos de los más débiles, y la guerra, que es la máxima expresión de la idiotez humana.
Un mundo simple y complejo a la vez, el que ilustra Quino.
Porque el universo en el que Mafalda vive, piensa , protesta y se rebela es tan cotidiano... tan cotidiano que no puede serlo más: las habitaciones de su casa, la acera de su edificio, el aula.
Y sin embargo, el telón de fondo de ese pequeño mundo son los Beatles, la guerra de Vietnam, la revolución cultural, el conflicto de Oriente Próximo y otros temas de mucho calado.
También por lo que respecta a su geografía, Quino mira tan lejos como los grandes maestros, los que saben fotografiar nuestros pequeños rincones poniendo el mundo como escenario.