NO ES LO QUE SOY, ES LO QUE TENGO. ¿Conocéis la historia de Kevin Carter? Quizás no os suene su nombre, pero seguro que habéis visto alguna vez la foto con la que ganó el Premio Pullitzer y que acabó por arruinar su vida. Una historia para reflexionar.

"En 1994 el fotógrafo Kevin Carter ganó el premio Pulitzer por esta fotografía en la que puede verse a un pequeño niño ­-es el bulto de delante­- acurrucado en el suelo. Detrás vemos a un buitre al acecho.
Se dice que Kevin esperó unos 20 minutos para ver si el buitre abría sus alas y así conseguir una toma más impresionante, cosa que no llegó a ocurrir.

Tras la publicación de la fotografía ­-y no antes-­ se recibieron millones de llamadas interesándose por el destino del niño. Según Carter se recuperó lo suficiente para seguir su camino hasta la tribu que estaba a unos 20 metros.

Desde el momento en el que la fotografía vio la luz, el autor no paró de recibir durísimas críticas por no haber ayudado al niño, incluso hubo gente que le llegó a comparar con el mismo buitre que había fotografiado.

Cuando recogió el premio dijo:

Es la foto más importante de mi carrera pero no estoy orgulloso de ella, no quiero ni verla. La odio. Todavía estoy arrepentido de no haber ayudado al niño.

Cuatro meses después, Kevin Carter se suicidó.

Lo que más me llama la atención de esta  historia es que se critique a un hombre que lo único que ha hecho es reflejar un mundo que hemos construido entre todos. Posteriormente se supo que ese cuerpo desnutrido simplemente estaba defecando ­-quizás sólo aire-­ y el buitre esperando pacientemente los restos. Pero todo eso ya daba igual.

Vivimos en una sociedad que a pesar de tener ojos prefiere permanecer ciega. Una sociedad tan hipócrita que cuando alguien nos muestra la realidad preferimos matar al mensajero.

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P.D.: Recuerdan ustedes el eslogan de aquel anuncio que decía: “No es lo que tengo, es lo que soy”. Si uno mira esta fotografía entiende que los publicistas de aquella campaña se equivocaron, pusieron el eslogan al revés. El orden correcto sería: “No es lo que soy, es lo que tengo”. Así uno ya entiende mejor la fotografía, y se da cuenta de que ese bulto marrón sobre la tierra no es nada."